¿Cómo cuantificar la carga externa para la prevención de lesiones en deportes de carrera?

¿Cómo cuantificar la carga externa para la prevención de lesiones en deportes de carrera?

En 2023, la nueva versión de Stryd aportaba una de las variables encargadas de cuantificar la carga de impacto a partir de la fuerza vertical de reacción del suelo. También otro tipo de wearable como Frontier X2 la utiliza para cuantificar el riesgo de lesión en carrera. Aunque se trata de una estimación a partir de la aceleración, parece ser una variable interesante a tener en cuenta. Si deseas ampliar información puedes acceder a este artículo publicado hace 18 años. Por aquel entonces se utilizó la plataforma de fuerza como el Gold Standard de la medión de la fuerza. Actualmente, gracias a la tecnoclogía IMU se estiman algunas de estas variables a partir de la aceleración. La portabilidad de los IMU les ha convertido en la herramiento idónea para el análisis del movimiento a pie de campo, dejando las plataformas de fuerza para uso en I+D o de laboratorio. Además, los wearables tienen la ventaja de vincularse directamente a Connect, Training Peaks o sus propias plataformas para el control del entrenamiento.

En termino prácticos, se puede conocer el impacto generado del pie contra el suelo a partir del vertical average loading rate (VALR) e instantaneous vertical loading rate (VILR), ambas expresadas en peso corporal dividido por segundo (BW/s). En la gráfica vendrían representadas las tasas de carga vertical instantáneas (VILR) y promedio (VALR), calculadas sobre la porción de la curva de fuerza de reacción vertical del suelo entre el 20 y el 80% del tiempo hasta el pico de impacto.

Clare et al. 2006

A modo de ejemplo para su interpretación, corredoras con fractura de estres tibial corrieron con un VILR y VALR mayor que corredoras sin lesión:

Fuente artículo Clare et al. 2006

Estas variables estimadas por Stryd se pueden conocer de manera más amplia con RunScribe al existir una correlación directa con el pico vertical de fuerza de reacción del suelo, siendo esta una de las variables clave de este sistema.

Es muy importante tener en cuenta donde se coloca el sensor. No es lo mismo que el sensor vaya colocado en el pie como Stryd o RunScribe, que en el pecho como Frontier X2 porque desde donde se produce el impacto del pie hasta el pecho hará que la tasa de carga difiera en gran medida, es decir no se pueden comprar entre si sistemas con diferente colocación.

A modo de resumen, parece que todo está inventado, simplemente se trata de jugar con los números, la ciencia e invertir una cantidad de dinero importante en una buena campaña de marketing.

 



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